Sin perder el hilo

¿Recordais la lasaña del viernes? ¿La que se comieron Pablo e Iñaki?. Vale. Pues hoy era el día de comer restos. No quería cocinar. Así que encendí el horno para recalentar la lasaña. Pero... ¡claro!. Una vez encendido el horno ¿como no meter unas manzanas para asar?. Total no es trabajo. Y son deliciosas. Y huelen bien. Mmmm. Dejate llevar.


El horno está caliente... ¿Por qué no un inocente bizcocho de yogur?. Ahora bien, si le añado un poco de zanahoria rayada ¡estará más jugoso!. ¡Eh! ¿... y unos frutos secos?. Vale. Tiene buena pinta pero está un poco triste. ¡Voy a tunearlo!... Chocolate fundido y mermelada de fresa.




Pero ¡Alto! ¡Un momento! ¿No era hoy el día de los restos!?
(Este bizcocho está dedicado a mi hermano, a Charo y a Tines. Besos)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Dios Mio!
Pero esto es un pedazo de cielo!!
YO llevo el cafe! jaja

que buena pinta tiene ese pastel, yo creo que ya la mujer lo tenemos en la sangre.. una vez prendido el horno.. somos capaces de meter un cordero!

besos

Anónimo dijo...

Es lo tiene la brujería del horno... una vez que está encencido no sabes que podrá salir de ahí...
Muy buena pinta y apañadito para ser "de sobras", por cierto.

Anónimo dijo...

SAPRISTI!!! No coment