DOS. Penélope ha asistido a su primera kedada (real) de tejedoras.

El sábado a la mañana me recogí el moño y subí al autobús rumbo a mi primera kedada tejeril.
Para tener algo entre manos durante el viaje llevé un ovillo que compré a lía Knits en una feria hace varios meses. Es una lana preciosa (Handpaint Originals) , merino 30% con mohair 70% , color Seaglass.
Itaca queda como a sesenta km. de Bilbo donde Artileak convoca las kedadas. Así que comencé a probar con este material.
Enseguida me dí cuenta que, ni con agujas, ni con ganchillo normal conseguía una buena textura porque es una lana que está muy poco torsionada. He aprendido que cualquier punto, por bonito que sea, no sirve para cualquier hilo.
Como estos días estuve leyendo un montón de blogs me acordé de Cibernekanekane y su alijo de lanas y herramientas, así que probé la técnica del ganchillo tunecino [proximamente] con mi ganchillo de toda la vida. Como éste es corto, tejí una tira de diecisiete puntos (por ser número primo. No pregunteis por qué) para que no se escaparan por detrás. Este es el resultado. Mola.
Haced una visita a Cibernekanekane en el Síndrome Lanar y vereis unos trabajos que a mí me han dejado completamente deshilvanada.


Después de hacer unas compras que ya os contaré, me presenté en el lugar de la kedada cinco minutos antes y dejando un ovillo a la vista por si había alguna duda. (No olvideis que viajo de incógnito, sin tiara ni séquito. Las reinas de Itaca somos así. Sencillas)
Mientras esperaba pasé un susto terrible porque alguien desconocido me mandó un mensaje al móvil: "Penélope ha de teñir sus cabellos con henna". Sospecho que ha sido algún oráculo, pero no ha vuelto a manifestarse :O


Menos mal que terminaron apareciendo un montón de alegres tejedoras, que me hicieron recuperar la esperanza en el futuro de la humanidad.
Aintzi, Alaitz, Amaia, Anuska, Aran, Ascen, Aurora, Garbiñe, Iciar, Idoia, Josune, Koletta, Leire, Mar, Mariló, Marisa, Muir, Natacha, Nieves, Olatz , Pernan, Pili, Rosa, Rosi y Virginia
¡Otros mundos existen!


Finalmente vuelta a casa ¡que ya era hora!

...Y así es como Penélope ejerció de Ulises por un día.

No pude contenerme y yo también aumente mi alijo lanoso con un ovillo y un ganchillo tunecino, que compré en unos muy grandes almacenes. Pero eso ya es otra historia. [continuará...]

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que rica lana, yo no tengo en haber puntadas tunecino mas que la basica pero se que hay hasta doble cara... lo que hay que ver en la vida?

Y si, Gracias Vida que hay gente Fascinante y misteriosa,,,,,,

Anónimo dijo...

Si es que de vez en cuando merece la pena darse un respiro y darse una vueltecita por otros países, que Itaca ya lo debes de tener muy visto...
Las kedadas son de los mejorcitos efectos secundarios que nos proporcionan estas máquinas del demonio que son los ordenadores. Entre lo que uno aprende, lo que puede enseñar y lo bien que te lo pasas, no hay desperdicio!!